Nadie ignora la dificultad para establecer una distinción tajante entre enfermedad física y mental, en donde se supone que el mal afecta a la vez al cuerpo y al espíritu. En América del Sur, particularmente en las tierras bajas amazónicas, donde dichas concepciones de la enfermedad predominan, la materialización de agentes patógenos bajo la forma de objetos es muy extendida, notablemente bajo el aspecto de proyectiles o de elementos puntiagudos, filiformes, cortantes o duras
There are no comments on this title.