La estrategia metodológica para abordar el terreno se basó en entrevistas, pruebas de pala, inspecciones superficiales y registro fotográfico del paisaje, durante la prospección se recorrió la totalidad del bloque. En el sector Sur, de acuerdo con información suministrada por un habitante sobre un sitio arqueológico, se realizaron cuatro pruebas de pala, tres de las cuales fueron positivas. Se recuperaron 17 fragmentos cerámicos y 1 lítico. La cerámica recuperada no obedece a objetos muy elaborados y se relaciona con piezas cuya fabricación no requiere gran inversión de tiempo. Es posible asociar esta cerámica con la reportada para los grupos agroalfareros tardíos, sin embargo la muestra no es muy grande y bien conservada como para hacer más inferencias precisas. Teniendo en cuenta la información recuperada en este proyecto, se puede decir que el costado norte del río Cusiana es un área de bajo potencial arqueológico, pero según antecedentes y los hallazgos realizados, el costado sur del río, es un área de alto potencial arqueológico, razón por la cual si se requiere intervenir en este costado se deben tomar las medidas necesarias para salvaguardar el patrimonio arqueológico presente en esta zona