La información colectada hasta el momento sobre la meseta de Chaparral sugiere que el sitio no fue habitado en épocas prehispánicas, al parecer solo fue en épocas mucho más reciente que el sitio comenzó a ser ocupado de manera permanente. Es posible que las características del suelo que dificultan la producción agrícola fuesen determinantes para ello. Si tenemos en cuenta diferentes estudios realizados en el municipio podemos ver las comunidades prehispánicas y coloniales se asentaron en los bordes de los ríos, tal como es el caso del río Amoyá (Anónimo 2009 a y b) y no en sitios alejados de las frandes fuentes de agua. El patrón de ocupación prehispánico y colonial temprano es al borde de los ríos; en épocas posteriores la ocupación de la región se amplió, ocupando nuevas áreas, como la meseta donde se encuentra el antiguo y el moderno poblado de Chaparral; esta meseta comenzó a ser ocupada a finales del siglo XVIII, cuando hacia 1773 se comienza a formar el caserío que da lugar al antiguo pueblo de Chaparral. Es importante señalar que el sitio en donde se realizó la investigación está completamente alterado, dado que en él se construyó un pozo que hoy se encuentra abandonada, pero se da casi por descontado que este sitio fuese ocupado en épocas prehispánicas