La piedra de toque de la conflictividad social en la región está en el tema indígena, en tanto los espacios fundamentales a nivel económico, ambiental y geopololítico de la Sierra y de la península siguen ocupados y gestionados por los citados pueblos indígenas. Por ello el fondo del asunto tal vez que se lleva a cabo el reordenamiento territorial propuesto por la Constitución del 91 y planteado por aquellos antes que el reordenamiento aparentemente espontáneo que impulsa los procesos descritos, en realidad inducidos por los actores de poder local en función de garantizar "seguridad" y orden en la operación extractiva y en el ilusorio abastecimiento de agua a las descuidadas ciudades del entorno e la Sierra, pero también con el fin de consumir las re-apropiaciones de las tierras valorizadas por los corredores viales, portuarios y turísticos previstos, y para reorganizar y consolidar el poder político local y regional que permita controlar el acceso a los recursos públicos, y las mediaciones políticas con el Estado central.
There are no comments on this title.