Los dos primeros apostólicos del Casanare llegaron a Colombia procedentes de España con el objetivo de establecer la misión religiosa en el territorio llanero. Luego, se encargaron del vicariato, cuando éste fue separado de la diócesis de Tunja (1893) y constituido en unidad eclesiástica autónoma. Lo interesante es que el discurso empleado por Ezequiel Moreno y Nicolás Casa quien lo elaboró cuando realizaba su misión evangelizadora en Casanare, territorio poco poblado y donde los grandes debates políticos, económicos y sociales eran insípidos o inexistentes, está inscrito en el debate europeo de la intransigencia católica contra el mundo liberal moderno y sus ideas. Estos agustinos recoletos, al llegar al país, consideraron que en el mismo se presentaban condiciones similares a las europeas, por el simple hecho de que aquí existía una agrupación política denominada liberal, encasillaron la realidad colombiana en la europea occidental, Moreno y Casa, se sumaron al grupo de sacerdotes, los otros colombianos, que blandieron el discurso de la intransigencia en el mundo cuya mentalidad era esa: excluir al contrario de cualquier posibilidad de mediación. Este trabajo presente analizar el discurso intransigente de Moreno y Casas durante su labor como vicarios del Casanare, contextualizándolo en los procesos ideológicos que vivían el país y la institución eclesiástica a nivel mundial. Se trata de entender cómo los actores históricos vivían su mundo, sus tiempos, los contextos que le delinean e influyen, su contemporaneidad, y también como los ideaban en modelos de vida.
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